Judit Subirachs-Burgaya es conservadora de la obra de su padre desde 2004 con el objetivo de difundir el legado de uno de los escultores contemporáneos catalanes más importantes. Ha comisariado numerosas exposiciones y ha impartido diversas conferencias sobre la escultura catalana de los siglos XIX y XX. De manera que, el sábado 17 vendrá al Museo del Ferrocarril de Cataluña para ofrecer una visita especial sobre el artista Josep Maria Subirachs y específicamente sobre el friso escultórico expuesto en el Museo.
La escutlura de Subirachs se realizó el año 1979 y fue encargada para señalizar y decorar el acceso norte de la estación de Sants. La escultura se tenía que ver desde la Plaza de “Països Catalans” y por eso, está construida con 18 bloques grandes de dos toneladas cada uno, que se instalaron en la fachada de la estación. En la obra se muestran variaciones sobre el motivo de la rueda, decisiva para el movimiento y las comunicaciones en ferrocarril. Además, se esconde un mensaje que es posible descubrir si se mira con perspectiva, entre las curvas de los relieves se esconde la palabra “Barcelona”.