Caminos de paz

Caminos de Paz


Es una muestra, resultado de un trabajo multidisciplinar sobre la experiencia de los campos de concentración, buscando paralelismos entre la memoria histórica y el momento actual, mediante la mirada artística que se expresa en lenguajes fotográficos, grabado, dibujo y el collage. Éstos son los apartados que se pueden ver en la muestra.

La exposición fue creada en Manresa, único emplazamiento en el que ha sido exhibida hasta ahora que llega a Vilanova i la Geltrú dentro del trabajo que se lleva a cabo en el Proyecto Educativo Buchenwald, del que forma parte este Museo.

Sobre el Proyecto Educativo Buchenwald:

En junio de 2011, se reunió por primera vez, en el Museo del Ferrocarril de Cataluña, una comisión integrada por representantes del Amical de Mauthausen y otros campos, del Museo, del Instituto de Estudios del Penedés y de centros de secundaria de Vilanova. Bajo la idea inicial de crear una exposición que explicara el papel del ferrocarril, como testigo mudo en la deportación a los campos nazis. Se ponía así la primera piedra de lo que después ha sido el Proyecto Buchenwald.

La idea inicial fue transformándose en un proyecto más global. En estos 10 años son ya muchas las acciones desarrolladas y que hoy ya forman parte de las agendas de la comarca y del país:

  • Las charlas que cada año se realizan en los centros sobre la historia de la deportación
  • Las exposiciones temáticas mayoritariamente en el Museo del Ferrocarril de Cataluña (excepto en los años que no ha sido posible por las obras), pero también en otras sedes.
  • El Ciclo de Cine sobre la deportación a los campos nazis, con la proyección de documentales y de películas de renombre que ayudan a acercarse ya entender este período tan oscuro de la historia de la humanidad
  • Las presentaciones de libros en la Biblioteca Cardona Torandell
  • Las actividades internas de cada centro educativo
  • Los actos de recuerdo y homenaje a los deportados y deportadas, luchadores y resistentes antifascistas
  • La conmemoración del Día Internacional del Holocausto,
  • Los viajes de los jóvenes al campo
  • El trabajo de divulgación en las redes sociales, webs y medios de comunicación
  • Etc.

Ahora se ha sumado en el último año el Proyecto Stolpersteine, palabra que en alemán significa piedra que tropieza. El número refleja perfectamente el objetivo de estas pequeñas obras: hacer detenerse a los peatones e interpelarlos para hacer memoria; no olvidar los números de todos aquellos que fueron represaliados por defender sus ideas frente al nazismo. Este proyecto ha permitido dotar a las ciudades de un nuevo elemento de memoria en el espacio público, y mejorar el conocimiento de las vidas e historias de los deportados del Garraf-Penedès, con la publicación y difusión de sus biografías, en diferentes formatos.