Es una edificación de los años setenta del siglo XX, rehabilitada en 2018. Fue construida como supermercado para los empleados de Renfe. Este tipo de servicios de las grandes empresas, conocidos como "economatos", estaban ideados para la compra de productos básicos a precios más económicos y así paliar los bajos salarios de los trabajadores.
En la fachada principal, una nueva estructura a modo de celosía mediterránea, identifica las instalaciones del histórico Depósito de vapor que alberga hoy este centro patrimonial.
Mientras que en la recepción del Museo, la imagen de la cubierta y de los andenes de la estación más emblemática y monumental de Cataluña, Barcelona Estación de Francia, preside el interior.
El edificio dispone de un Espacio Audiovisual donde se puede recorrer la historia del transporte en tren del país en un corto de 10 minutos realizado en cuatro idiomas, lenguaje de signos y subtitulación. Hay una maqueta multisensorial, adaptada a personas con problemas de visión, que se ofrece a todos la posibilidad de conocer el conjunto de las históricas instalaciones ferroviarias de Vilanova y la Geltrú. Además, de otros elementos que nos comienzan a introducir en el mundo del ferrocarril desde el inicio de la visita.
Para los pequeños de la casa, hay un espacio infantil: “La Petita Estació de Vilanova” (La Pequeña Estación de Vilanova). Aquí los niños y niñas pueden jugar mientras se vinculan al mundo de los trenes, y también es el espacio que protagoniza las actividades infantiles que ofrece el Museo.